Capitulo 5 Entrevista al alcalde de Ovalle Jonathan Acuña. Oriundo de la localidad de Unión Campesina, hizo sus estudios en el liceo Bicentenario Alejandro Alvarez Jofre, inició estudios de derecho, para después continuar la carrera de Administrador Público, de la que se tituló recientemente.
Ha sido concejal por la comuna en dos períodos consecutivos, y actualmente ejerce la alcaldía, hace poco más de un año y medio y hasta el 5 de diciembre cuando se instalan las nuevas autoridades y concejos.
A: Para usted, más que como alcalde ¿qué es el agua?
J: Siempre que me hacen esa consulta yo me acuerdo de la media, cuando veíamos si era elemento o compuesto, porque es un compuesto, pero más allá de eso, yo creo que el agua lo es todo, para la subsistencia de una sociedad que pretenda ser sustentable y desarrollarse en el tiempo tanto en la ruralidad como en lo urbano, el agua es un compuesto esencial de desarrollo económico, puede tener una cantidad de conceptos asociados, pero principalmente es vida, sin el agua es muy poco probable que una sociedad, un territorio, pueda subsistir en el tiempo.
A: ¿Y desde esta mirada de subsistencia, ahora ya como alcalde, cuál es la situación del agua en la comuna y en la región?
J: Yo creo que, en los últimos 20 años, en la región de Coquimbo y principalmente en la provincia del Limarí, hemos visto cómo ha ido disminuyendo la cantidad, la calidad, del agua, pero además las medidas de mitigación, los proyectos relacionados con esta materia, y en los últimos la situación se ha vuelto mucho más crítica. Más allá de la escasez misma, porque el diagnóstico general es que tenemos falta de agua, zonas de desertificación, pero qué impulsamos como Estado, como gobierno, como gobiernos locales, para ir en beneficio de los vecinos e ir frenando esta situación. Mucha gente nos decía que hay que impulsar mayor cantidad de camiones aljibes, pero eso en definitiva no soluciona en lo absoluto el fondo del problema… sino hubiesen existido las lluvias de este 2024 estaríamos hablando de racionamiento, tener ciertos horarios de uso, como ocurre en otras comunas de la provincia; por lo cual, además nos urge elevar a la discusión pública a medidas que vayan relacionadas con plantas desaladoras locales, el gobierno hablaba de plantas regionales como la del Panul, pero creo que a nivel provincial nos falta tener ideas un poco más locales de desalinizadoras. En tiempos de Bachelet se fijaron tres puntos específicos para desaladoras. Pero también proyectos complementarios, nosotros estamos realizando a menor escala, en establecimientos educacionales, la recuperación de aguas grises y negras, tenemos atrapanieblas en el sector rural, todo esto ayuda, sirve y es lo que tenemos que poner en la discusión. Y urge, porque además con las alta temperaturas que vemos, se vienen los incendios, perdemos vegetación que necesitamos cuidar y proteger.
A: Hay soluciones como los camiones aljibes que venían a subsanar una situación de emergencia, pero se terminan instalando como la manera para acceder al agua, sobre todo en zonas rurales. Pero también hay otras cosas que han impulsado desde la municipalidad, como una ordenanza que se aprobó en marzo de este año y que tiene que ver con la gestión y el uso eficiente del recurso hídrico, que apunta a la conservación ambiental y el desarrollo sostenible. Para ello se están haciendo actividades de concientización, educación ambiental, fiscalización, fomento del ahorro del agua de uso doméstico, industrial, agrícola y público, se previene la contaminación, se aumenta la participación ciudadana ¿cómo les ha ido con estas medidas?
J: Una ordenanza de estas características piensa en una comuna mucho más verde, sostenible y responsable respecto del medio ambiente y del entorno. Fuimos pioneros a nivel regional, donde se incluyen conceptos y prácticas que hablan de cuán capaces somos de cuidar el agua en todas sus formas. Nos ha ido bastante bien, se han instalado en los establecimientos educacionales estos conceptos de forma muy positiva, los niños y adolescentes tienen una voz muy fuerte a la hora de poder ir generando los cambios que uno espera que se den a nivel social, pero muchas veces somos los adultos los que no logramos captar estos conceptos. Creemos que es un primer paso, hemos tomado bastantes medidas partiendo de esta ordenanza, porque hablar de agua y escasez es también hablar de salud pública, del cuidado del entorno, te pongo un ejemplo, la municipalidad había tenido un comodato por 2 acciones de agua con Aguas del Valle, por más de 20 años, y hoy no se va entregar nuevamente a título gratuito, sino que queremos buscar una alternativa como establecer estaciones de carguío municipal, para que nuestros camiones aljibes no tengan que hacer largas filas para cargar, demorando más de una hora cada vez, sin tener ningún tipo de prioridad, retardando el tiempo de distribución a las zonas rurales. Y el tema de fondo no pasa necesariamente por tener más camiones, sino por ser más eficientes. Y eso es lo que buscan instrumentos como la ordenanza, el impacto social, la capacidad de reflexionar qué puedo hacer y qué no, como el lavado de autos en la vía pública, que era multado durante la pandemia, o cuestiones como el riego de las áreas verdes en horarios que no corresponden, hay que ajustar contratos para no estar regando a pleno sol, sino regar cautelando menos afectación del entorno y del agua que se ocupe.
A: Hay un grupo de Batuco que propuso al municipio un piloto en la plaza de armas de plantación nativa que requiere poca agua, siguiendo la tendencia de sacar los pastos y poner especies que consuman menos agua. El medio ambiente tiene una consecuencia sobre la disponibilidad de agua ¿cómo se está manejando aquello?
J: Estos proyectos de ciudad que van de la mano con el medio ambiente, son las que se deben priorizar, hoy los proyectos de intervención del espacio público, deben tener un enfoque medioambiental, como los jardines secos, en la plaza de armas por ejemplo estamos diseñando un perfil de proyecto que pretendemos dejarlo a disposición de la nueva administración, que favorece una mejor distribución del agua y de los espacios. Además estamos en plena discusión del plan regulador comunal, y es muy importante relacionarlo con estas materias, para dejar espacios para la reforestación, tenemos un crecimiento población hacia el acceso parque norte y sur, en el sector de Villa Agrícola hay una proyección de sobre 2000 viviendas de aquí al próximo año, ya se están construyendo sobre 800, pero van a quedar espacios disponibles desde el plan regulador, para que no se pueda edificar y se generen pulmones verdes muy necesarios para la comuna.
A: ¿Se es consciente del problema del agua cuando se hace un plan regulador?
J: Muchas veces no consideran ese tipo de conceptos, lo hemos querido hacer con este nuevo plan regulador, donde además la participación ciudadana que es fundamental nos ha mencionado temas de entorno, mitigación, medio ambiente, no solo pensar grandes ciudades desde el desarrollo urbano, vial o de vivienda. En septiembre empieza a desarrollarse el Parque Bicentenario, tenemos proyectos aprobados en el sector de Costanera, tenemos dos parques urbanos, uno en la población Ariztía que es un parque de la juventud que esperamos que se empiece a construir los próximos meses, y todos miran al cambio climático, no podemos considerar las mismas especies que considerábamos hace tiempo, no podemos pretender usar mucha agua, por eso la importancia de considerar las especies nativas, creo que este plan regulador refleja un poco eso, y le va a tocar en la tercera y cuarta etapa a las nuevas autoridades poder concretar esa mirada de lleno. Queremos resguardar, que se declare humedal urbano en el sector de la Costanera, que es zona no suficientemente protegida, hay una gran cantidad de comodatos deportivos importantes por lo demás, que se relacionan también con el entorno medioambiental, tal como se resguardó la caleta El Toro con la declaración del Humedal, esto hay que analizarlo y ver si hay las voluntades para seguir creando conciencia.
A: Los humedales son importantes zonas de recarga, y en Ovalle basta una lluvia para que nos relajemos, pero seguimos en un proceso ya no de sequía, sino de desertificación y ya no bastan las soluciones de camiones aljibes, sino que hay que preguntarse también por la distribución, gran cantidad de agua va para el sector productivo y ni siquiera garantizamos los 100 litros de agua diario por persona, el agua se va en containers hacia afuera de las cuencas ¿qué opina usted de eso?
J; Acá había una práctica bien común cuando llegamos a la municipalidad, los camiones aljibes iban para las industrias, llenaban piscinas y eso lo cortamos derechamente. Nuestra prioridad es llegar con el agua a los vecinos que toda su vida han vivido en el sector rural, como un criterio principal de distribución y no malgastar el agua bajo esas prácticas. Efectivamente el criterio de la OMS que no muchas veces se cumple, nos obliga a generar estrategias, hay que considerar que pospandemia, la cantidad de población que emigró hacia el sector rural fue grande, antes nosotros abastecíamos 1300-1400 familias; pospandemia, sobrepasamos las 2000 familias, con la misma cantidad de camiones, porque muchas veces se incorporaba de forma ilegal en la venta de terrenos, el abastecimiento municipal de agua, y además la cantidad de segundas viviendas en el sector rural nos hizo entrar en un conflicto sumamente grande y seguíamos priorizando a quienes han vivido toda su vida, pero también está esta otra gente que lo vendió todo para irse al sector rural o lo mantiene como segunda vivienda. Ya no podíamos llegar a los 7 o 15 días, sino que a los 21, 22, pero hemos ido mejorando ayudados por los filtros de las juntas de vecinos que conocen su entorno, que saben quienes pueden pagar por su agua, y con la alianza con la delegación presidencial, para la distribución del agua de emergencia. Yo creo que el tema se va a agudizar cuando los niños salgan de vacaciones, los 100 litros no van a alcanzar… tenemos dos camiones que se van a incorporar, y vamos a mejorar la entrega, pero el problema va a persistir. Por eso estamos impulsando modelos de optimización y reutilización del agua con pequeños productores, crianceros, y también grandes empresas.
A: ¿Qué opina usted de la distribución del agua por derechos de aprovechamiento?
J: Dentro de la discusión legislativa de un tiempo atrás se planteaba cuán capaces somos de ver el agua como un bien de consumo o como un derecho universal, yo creo que ha existido un abuso histórico de las grandes empresas respecto del agua, y uno lo ve quizás no a gran escala acá en Ovalle, pero uno va a visitar comunas vecinas como Monte Patria y ve cómo se ha abusado durante años en la ocupación y distribución de las aguas.
Nosotros logramos este año un diálogo muy interesante y fluido con diferentes actores, agentes del Estado, pero también con las juntas de vigilancia, y se hace evidente que se necesita mayor fiscalización y regulación, la DGA conversa cuando quiere conversar, falta mayor agilidad y eficiencia , también en los procesos de la DOH con los SSR. En comunas vecinas se realizaron proyectos de acumulación de agua donde grandes empresarios se comprometieron a entregar agua a la comunidad, y una vez hecha la inversión los empresarios dijeron no vamos a cumplir.
A: Eso es lo que genera impotencia en la gente. Últimamente se están haciendo muchos pozos, hay deforestación nativa para habitar, y eso produce un impacto en la recarga de las cuencas, lo mismo que la falta de protección de los glaciares y los ríos… como rellenamos las cuencas ¿cuáles son las soluciones y sus consecuencias?
J: El entorno es el primer problema cuando se instalan grandes empresas, hay judicializaciones y se entran en disputas respecto a cuán eficientes son las medidas de mitigación. En los loteos, no hay regulación, los precios son accesibles, hace muy poco se reguló para terminar con los loteos brujos, pero hay mucha desinformación comunitaria, la gente compra sin cerciorarse si está comprando un terreno o un derecho, si el lugar está saneado, si se puede edificar. En el caso de las plantas desaladoras, hay impactos, y ahí los modelos deben especificar las medidas de mitigación y los efectos secundarios. Hay dos premisas, la principal es poder llegar con consumo de agua a las familias, y la otra es cuán capaces somos de proteger el entorno o de causar la menor cantidad de problemas al medio ambiente, y esas dos premisas no han logrado equilibrarse. Además, hablamos de desaladoras como la del Panul que yo considero que es favorable, pero no va a estar lista en tres o seis meses, sino que, en 2028, 27 y tendremos un problema persistente hasta esa fecha.
Los servicios deben ser más eficientes, tener más atribuciones y ejercer una mejor regulación y fiscalización. En los pozos, nosotros hemos entregado comodatos para prospecciones para encontrar agua, y ser más eficientes en la entrega en ciertos lugares de la ruralidad, en Campo Lindo por ejemplo, probamos en un terreno al costado de la escuela, encontramos y con una cámara de impulsión llegamos hacia arriba, pero esos son pozos regulares, pero qué pasa con quienes realizan pozos irregulares.
A: Claro, es necesario que las más de 40 reparticiones públicas relacionadas con el agua dialoguen entre sí, y que las soluciones que se diseñen no creen más problemas, porque las desaladoras por ejemplo pueden afectar la costa a los pescadores, mariscadores…
J: Depende cómo se instalen, porque en la comuna hay caletas que tienen sus plantas individuales y no les ha generado problemas significativos versus los positivos que es la disposición de su propia agua, el tema es que el estudio y los diseños aseguren el cuidado del entorno. Quizás a mayor escala los beneficios y los problemas sean también mayores.
A: Pero también hay otras soluciones, infiltraciones, agricultura regenerativa, soluciones pequeñas de vanguardia ambiental, que no permean la política pública… ¿conoce usted alguna de esas iniciativas?
J: Algo, pero me quedo con eso que planteas de permear la política pública, cuán capaces son los organismos del Estado de sentarse a discutir los temas y trascender los diagnósticos y actuar. Una de las personas que ha favorecido que esto ocurra es el delegado presidencial regional, que juntó a sus oficinas y departamentos para hablar del agua, Galo Luna, como impulsor de la mesa regional del agua, sentó a las autoridades, alcaldes, juntas de vigilancia, organismos técnicos relacionados a la materia, y promovió un intercambio muy positivo, esas mesas tienen que persistir en el tiempo para concretar modelos más visionarios, y se extendería el éxito que tienen a nivel local, y se podrían destinar recursos, desde agricultura y el GORE.
Nadie nos asegura lluvias el 2025, hay que destinar más recursos al sector rural, yo traté de instalar un sello de mi gestión con medidas para mejorar los problemas de fondo de la ruralidad.
Para cerrar quisiera agradecer a la radio por poner estos espacios que son importantísimos en la agenda comunal, pocos medios lo hacen, y nos permite hablar de estos temas, sigan haciéndolo, siempre a su disposición en lo que nos queda de mandato.