Mediante sus Redes Sociales su Hija Mirtha Gallardo, Presidenta de las Comunidades Agrícolas, comunicó el sensible fallecimiento de su padre, e indicó que su velorio será en su casa habitación ubicada en la localidad de Canelilla.
Don Emiliano Gallardo; fue un hombre campesino de lucha y esfuerzo, un trabajador incansable, Agricultor, Criancero, que siempre buscó el bienestar de su familia y de su comunidad. Se sentía orgulloso de sus raíces, vistiendo siempre de huaso, como hombre de campo, valores que trasmitió a toda su familia, a sus hijos, Milo, Pedro, Luis, Toño, Manuel, Francisco y a sus hijas Ema y Mirtha Gallardo Saavedra, su hija mayor que heredó de él, la vocación por la lucha social.
Don Emiliano, fue uno de los Fundadores de la Asociación de Comunidades Agrícolas de la Provincia del Limarí.
Él recorrió en su caballo cada rincón de los cerros y cordillera de su tierra, la comunidad agrícola de Canelilla, fue Minero, Pirquinero, este conocimiento le permitió proteger en los años de la Dictadura Militar a muchos compañeros, que debieron salir del país por estos pasos usados por los crianceros trashumantes.
A lo largo de su vida ayudó desinteresadamente a muchas personas y era emocionante escuchar esos relatos espontáneos de personas agradecidas que guardaban recuerdos de la mano amiga que siempre tendió.
Contaba él: que su madre lo llevó a inscribir al registro civil cuando tenía unos 5 años más o menos, porque así era en aquellos tiempos, y recordaba que iba a caballo por los cerros corriendo en una competencia con su amada madre. Así es; que la edad de don Emiliano, no era exactamente la que su partida de nacimiento decía, y vivió más de cien años, una vida que estuvo engalanada de todas las tradiciones campesinas: fiestas religiosas, trillas, rodeos y muchos encuentros campesinos.
Don Emiliano, fue un fiel devoto de la Virgen de Andacollo, cada año la visitaba de a caballo, desde su casa hasta la localidad religiosa, acompañado de hijos, nietos y bisnietos. Entre las condolencias que recibió la familia hoy, llegaron, las de los amigos de Andacollo que dijeron:
“No veremos más a don Emiliano aparecer, entre los cerros cada año para la fiesta de Andacollo, pero si estará en nuestros corazones el recuerdo de un huaso, más que orgulloso de sus raíces”.
Descanse en paz, Padre, Abuelito, Bisabuelo, Suegro, Amigo y Compañero Emiliano Gallardo. Hasta Siempre.